
Viviendo sin vivir, sintiendo sin sentir,
Amando sin pensar,
en el dolor de la despedida.
Eras mi vida, mi sueño, mi alegría,
¿dónde quedó nuestro amor?
Hoy, vagabundo de tus caricias,
Te busco en los rincones de mi pensamiento,
te llamo en el silencio de la noche…
nada… soledad… desesperanza.
¿Dejaré de amarte algún día?
La Dama Blanca
No hay comentarios:
Publicar un comentario